La
Dama de Elche es un busto íbero tallado en piedra caliza que se data entre. Mide 56 cm de altura y tiene en su espalda una cavidad casi esférica de 18 cm de diámetro y 16 de profundidad, que posiblemente servía, para introducir reliquias, objetos sagrados o cenizas como ofrendas al difunto. Otras muchas figuras ibéricas de carácter religioso, halladas en otros lugares, tienen también en su espalda un hueco y, como la Dama, sus hombros se muestran ligeramente curvados hacia delante.
La pieza se encontró cerca de
Elche, donde existe un
montículo que los árabes llamaron
Alcudia y que en la antigüedad estaba casi rodeado por un río. Cuando llegaron los árabes, situaron la ciudad más abajo, en la parte llana, conservando el topónimo romano de
Illici, que fue arabizado por el sonido en «Elche».
Dibujo Hipotético de la dama de elche
No hay comentarios:
Publicar un comentario